“Argentina sangra por las barrancas del río Paraná” es una cuidada edición de Editorial Ágora, que además de presentar rigurosas investigaciones sobre problemáticas centrales de nuestra realidad regional, nacional y global, lo hace de modo ameno, con mapas, infografías, ilustraciones y un diseño que invita a la lectura y que habilita, incluso, un uso educativo del material. En palabras de Orellano: “Queremos que no sea un tema solo para académicos y entendidos sino un tema de la soberanía del pueblo. Las imágenes buscan eso: que sean las puertas de entrada a la investigación.”
Un libro imprescindible
“Argentina sangra por las barrancas del río Paraná” es un libro que va a las raíces del saqueo que sufre nuestro país desde los comienzos de su existencia como tal, así como investiga las consecuencias de este modelo sobre el pueblo trabajador en particular.
En diálogo con Río Bravo, Luciano Orellano nos contó que el libro “surge como una necesidad, de vincular una realidad de la Argentina de los últimos años. Por un lado, vemos que fluyen los manantiales de la riqueza, sobre todo aquí en el Gran Rosario, adonde llegan más de un millón de camiones y formaciones de más de cien vagones; una Argentina que se ha convertido en una alfombra verde, casi desértica, donde se ha triplicado la producción; pero por otro lado nos han dejado una Argentina casi de posguerra: pobreza estructural, desocupación, empresas Pyme que no encuentran salida, profesionales desocupados, asentamientos irregulares, una Argentina profundamente injusta que sufre, que nos duele.”
La obra que presenta Luciano Orellano no se queda en la descripción de estos males. Se pregunta por las causas y de allí se extraen otros caminos que nuestro país podría tomar, a tal punto que uno de los subcapítulos se titula: “¿Por qué Argentina no fue los EE.UU.?”. La pregunta por las causas, sostiene Orellano, “es lo que nos moviliza, y para eso tenemos plena conciencia de la necesidad de un intelectual colectivo que tenga compromiso con quienes nos consideramos paisanos, que significa país adentro.”
La pandemia resultó un contexto propicio para darle forma, durante 8 meses, a un libro que en realidad es fruto de más de 10 años de investigaciones. “Nos fuimos uniendo con grupos de pibes que tienen las mismas preguntas e inquietudes, fuimos conformando la necesidad de investigar, un trabajo de medio millar de páginas, que aborda temas extremadamente complejos, y lo que vamos descubriendo es que es una Argentina profundamente dominada por el capital extranjero en cada uno de los eslabones productivos.”
Hace un análisis de lo general y después va a lo particular. El séptimo capítulo, por ejemplo, se titula Planificación Tributaria Nociva del Saqueo. Allí se analiza “el capital financiero internacional, acá en Argentina, qué son los paraísos fiscales y cómo actúan en relación a estas empresas: los llamados precios de transferencia, la maquinaria de la evasión fiscal tributaria, cómo es la gran estafa a los productores y al Estado con el tema de las retenciones, ¿quién las paga?, el tema de la especulación cambiaria, cómo juegan los paraísos fiscales, esos balances de esas empresas que siempre ocultan más de lo que dicen”, explica Orellano.
Sobre el aporte que el libro puede hacer para el conocimiento profundo de nuestra región, el autor sostiene: “El libro aporta, no sólo para la Argentina sino para los países hermanos, la fórmula que explica cómo se produce el saqueo de los países imperialistas, a través de las empresas (como la yanqui Cargill, la china Cofco Agri o la francesa Dreyfus), en este caso, de cereales.”
En este marco, la discusión que justamente por estos días se está dando sobre el futuro de la hidrovía del Paraná puede ser comprendida cabalmente a partir de los elementos y la historia que el libro ofrece.
La discusión sobre la hidrovía
La hidrovía es un sistema hídrico navegable de 3.442 kilómetros, el canal fluvial más importante de nuestra región, que conecta a Argentina, Paraguay, Bolivia, Uruguay y Brasil con el resto del mundo. Esta “autopista fluvial”, en palabras de Orellano, en la que confluyen los ríos Paraná y Uruguay, y todos sus afluentes, más de 17 mil kilómetros de ríos inferiores de la cuenta del Plata, es de importancia trascendental para la economía, la vida y la soberanía de nuestra provincia, nuestro país y América del Sur. “Es un doble embudo, de entrada y salida” al interior de nuestro continente, vinculando los campos, la ganadería, las minas y los principales medios de producción de los países mencionados, incluyendo por ejemplo el polo agroexportador de Rosario, uno de los más importantes del mundo.
¿Por qué está hoy en el centro de debates que sin dudas deberían ser públicos y masivos? La administración de la hidrovía está en manos, desde el gobierno de Menem y con sucesivas concesiones, del consorcio conformado principalmente por Jan de Nul (de capitales belgas). Este grupo tiene el control de semejante herramienta vital para la soberanía nacional de nuestro país sobre sus recursos. Se suma a la importancia de esta discusión el hecho de que buena parte de lo que por allí circula no está registrado y escapa al control y la fiscalización del Estado.
A principios de marzo vence la concesión de la hidrovía en manos privadas. Según el Acuerdo Federal firmado el pasado 28 de agosto entre los gobernadores de Entre Ríos, Buenos Aires, Chaco, Corrientes, Formosa, Misiones y Santa Fe, con ministros del gobierno nacional, la hidrovía pasaría a ser administrada por el Estado Nacional en conjunto con las mencionadas provincias, en el marco de la Hidrovía Sociedad del Estado para el control y la administración de la misma. El 51 por ciento de las acciones de dicha sociedad corresponderían a la Nación y el 49 por ciento restante a las provincias (a Entre Ríos le correspondería el 7 por ciento). Esta decisión fue revertida por el decreto 949/2020 del PEN, que en su artículo 1° delega en el Ministerio de Transporte la facultad de efectuar el llamado y adjudicación de la licitación pública nacional e internacional para “la modernización, ampliación, operación y mantenimiento del sistema de señalización y tareas de dragado y dragado y mantenimiento de la vía navegable troncal”, por lo que anula la creación de la sociedad del estado y deja al Consejo Federal como un órgano consultivo. Empresas monopólicas extranjeras como la Jan de Nul nuevamente podrán quedarse con el control, la administración, el dragado y el cobro de peajes en nuestra hidrovía.
Frente a esto, el senador nacional Jorge Taiana realizó un pedido de informe y diferentes fuerzas políticas han impulsado la generación de espacios de debate para pedir la derogación del decreto 949/20. Según cita el sitio Página Política, el pedido de Taiana sostiene que “La creación de la Administradora de Hidrovía Federal S.E. significó dejar sin efecto la maniobra del contubernio PRO-monopolios y retomar el camino de soberanía”. Y agrega: “El decreto 949/2020 significa un retroceso respecto de aquella concepción emancipadora. Las omisiones y ambigüedades que se señalan en ese pedido abren las puertas para la pérdida de soberanía en un aspecto de extraordinaria relevancia y que se viene debatiendo desde el origen de nuestra nacionalidad: la navegación de nuestros ríos interiores y el control de las rentas del comercio exterior”.
Luciano Orellano, al respecto, señala que las y los argentinos “no podemos vivir de espaldas a esto. Esta riqueza está concentrada y administrada por manos extranjeras, por eso es tan importante conocer para defender. Aquí vamos a encontrar respuestas a los problemas de nuestros males y los de los países hermanos.”
Para el próximo 22 de febrero está convocada una reunión del Consejo Federal de Hidrovía en la ciudad de Rosario. Orellano nos cuenta e invita: “Ahora con Carlos Del Frade, un gladiador en este tema, estamos convocando a democratizar esta discusión: audiencias públicas, multisectoriales por la soberanía, autoconvocados, consulta popular, cabildos abiertos... Nosotros lo que pedimos es la derogación del decreto 499/20 que anuló la creación de la Hidrovía Sociedad del Estado para tener control y administración por parte del Estado. Tenemos que recuperar el Paraná. Tenemos que impulsar todo lo que sume para que la gente pueda conocer. Conocer para defender.”
Sobre el autor y la edición
Luciano Orellano es “un laburante, un hombre siempre comprometido con la idea emancipadora, la idea de Belgrano”. A los 10 años comenzó como obrero industrial y en la localidad santafesina de Arteaga hizo sus primeros pasos en la militancia gremial como obrero metalúrgico. Entre 2004 y 2010 fue Secretario Nacional de la Juventud Comunista Revolucionaria y actualmente es dirigente nacional y del regional Santa Fe del PCR. Preside el Partido del Trabajo y del Pueblo en esta provincia.
El libro, que se publicó a fines del 2020, se puede conseguir en la página de la editorial Ágora. Tiene prólogos de Carlos Del Frade, Pedro Peretti, Mercedes Meier, Daniel Yofra, Oscar Ainsuain, Luis Molinas y Germán Mangione, además de diferentes colaboraciones en una cuidada edición.
Publicado por Río Bravo el 5 de febrero de 2021.