A fines de esta semana, la decisión de establecer en forma inmediata una única tarifa plana de $ 1.200 para el transporte público entre Paraná y Colonia Avellaneda, San Benito y Oro Verde, a partir de la decisión del gobierno nacional de quitar los subsidios al transporte público de pasajeros en el interior del país; generó repudios y situaciones de extrema gravedad. Tal como denunció la Asamblea Ciudadana Vecinalista de Paraná, “el día viernes 18 de octubre hemos asistido a situaciones muy graves que negaron a la población su derecho a la movilidad, bajando de las unidades a numerosos niños y adolescentes que no contaban con fondos suficientes en sus tarjetas SUBE.”

Este boleto único de $1.200 significaría que, por ejemplo, una pareja de trabajadores y sus dos hijos, habitantes de alguna de las ciudades que rodean Paraná, si tuvieran que ir diariamente a la ciudad capital (para trabajar y asistir a la escuela), tendrían que gastar solo en una ida y vuelta familiar, la friolera de $9.600. Casi 10 mil pesos, una familia tipo, para ir y volver una vez por día; casi 250 mil pesos por mes.

Ante las quejas y repudios que generó esta situación, por ejemplo de parte de sindicatos como AGMER Paraná o la asamblea interuniversitaria de Paraná y Oro Verde; el gobierno de Entre Ríos decidió anunciar medidas temporales para, según informó, “asegurar el acceso gratuito al transporte público de estudiantes de todos los niveles educativos” en las localidades comprendidas dentro del servicio metropolitano (San Benito, Colonia Avellaneda, Oro Verde, Sauce Montrull, Villa Fontana) y estudiantes de la ciudad de Paraná. La medida comenzará a regir desde este lunes, aunque el Gobierno de Entre Ríos “está trabajando para que este beneficio a estudiantes vuelva a impactar de manera efectiva en el sistema SUBE durante los próximos días, para que de esta manera, cada estudiante vuelva a abonar el mismo valor de la tarifa que en los días previos al aumento”.

Los reclamos se habían hecho oír en las distintas ciudades implicadas en el conflicto. Por ejemplo, San Benito Entre Todos le exigió al Municipio de San Benito que “no continúe ignorando un problema que afecta directamente la calidad de vida de todos nosotros. Exigimos que el intendente y sus funcionarios se pronuncien sobre el subsidio del transporte y detallen las acciones que van a tomar para garantizar que el transporte sea accesible y de calidad.”

Por su parte, la Asamblea Ciudadana Vecinalista de Paraná denunció el modo en que el aumento generalizado del boleto afectaba a estudiantes de todos los niveles, trabajadores y jubilados, así como marcó particularmente la “situación de riesgo” de las personas con discapacidad que no tienen otra forma de movilizarse.

La decisión anunciada por el gobierno provincial revierte solo en parte (para estudiantes) y de forma temporal, además de no inmediata, los problemas denunciados en los últimos días. El panorama es sombrío para las semanas próximas y diversas entidades y organizaciones se preparan para el recrudecimiento del conflicto al respecto.

Publicado por Río Bravo el 20 de octubre de 2024.