Un operativo de inspección laboral realizado este miércoles en la localidad de Villa del Rosario, departamento Federación, detectó al menos cinco trabajadores en visibles condiciones de hacinamiento, en un galpón, descansando sobre camas armadas con cajones. Todos los obreros relevados son oriundos de la localidad de Saladas, provincia de Corrientes.

La situación, que no se limita a esos cinco trabajadores, fue descubierta por miembros de la secretaría de Trabajo de la Provincia –delegaciones Chajarí y Federal– y del Sindicato de la Fruta, en un galpón de empaque pertenenciente al productor José Luis Pizzio, ubicado sobre la Ruta Provincial 2.

Además de las irregularidades detectadas, desde el sindicato denunciaron que Pizzio "le debe al sindicato y a la obra social cientos de miles de pesos".

El operativo continuaba y se esperaba encontrar a más trabajadores que realizaban trabajos de cosecha y empaque y que debían ser reemplazados.

Según está previsto por las autoridades intervinientes, las inspecciones se realizarán todas las semanas en las zonas citrícolas de Concordia y del departamento Federación. En los últimos meses, el resultado de los operativos en la zona de Chajarí y alrededores comenzó a cambiar, algo que, según las denuncias de los trabajadores, se debe al desplazamiento del anterior encargado de la delegación Chajarí de la secretaría de Trabajo, Silvio Pucheta, que según dejaron trascender, avisaba a los empleadores cada vez que se estaba por realizar un control. Cada vez que llegaban los inspectores y representantes sindicales, se encontraban con las quintas y los galpones vacíos o con los empleadores preparados para enfrentarlos.

"Algún fiscal tiene que tomar cartas en el asunto"

Consultado por Río Bravo, el titular del Sindicato de la Fruta, Alcides Camejo, explicó que una vez realizada la inspección se labra un acta y se establecen las multas correspondientes pero lamentó que, por lo general, nada cambia en cuanto a las condiciones de los trabajadores y en la forma de manejarse de los empleadores.

"Pagan la multa, arreglan todo con plata y siguen igual", cuestionó el sindicalista que consideró que "tiene que haber un fiscal, algún juez, que tomen cartas en el asunto, porque esto también es trata. Tener viviendo a las personas de esta forma, así sea una, en camas de cajones, ahí tienen que hacer sus necesidades, comer, descansar. Todavía seguimos encontrando estos personajes que siguen siendo patrones de estancia y siguen teniendo a los trabajadores lamentablemente viviendo así y mucho peor".

Publicado en Río Bravo el 25 de agosto de 2021