El salario mínimo perdió de nuevo en el octavo mes del año y acumula una contracción real del 32% desde noviembre de 2023. Su valor actual es incluso inferior al registrado antes del colapso de la convertibilidad hace 24 años.
Tras el anuncio de una nueva convocatoria, un estudio elaborado por la CTA revela la pérdida de poder adquisitivo con la nueva gestión de Javier Milei, por bajos aumentos.